En nuestras clases infantiles, la reparación Danjon es mucho más que un simple ejercicio físico: es un momento de conexión, concentración y equilibrio interior.

El Danjon —centro energético situado en la parte baja del abdomen— es clave en muchas artes marciales tradicionales. Trabajarlo ayuda a los niños a fortalecer su postura, mejorar su respiración y desarrollar la conciencia corporaldesde una edad temprana.

Durante la reparación Danjon, los pequeños aprenden a detenerse, respirar y centrar su energía después del entrenamiento físico. Este breve ritual les enseña a equilibrar cuerpo y mente, a controlar sus emociones y a recuperar la calma, habilidades esenciales tanto dentro como fuera del tatami.

Más allá del aspecto técnico, esta práctica refuerza valores como la disciplina, el respeto y la atención plena. Los niños no solo mejoran su rendimiento marcial, sino que también aprenden a escuchar su cuerpo y a cuidar su bienestar.

En el vídeo podrás ver cómo realizamos la reparación Danjon en nuestras clases infantiles y por qué se ha convertido en un momento favorito para nuestros alumnos.